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Publicado por en Ene 8, 2021 en Medicina Deportiva | 0 comentarios

SINDROME DEL PRONADOR

CAUSAS COMUNES

El síndrome del pronador, con frecuencia denominado “síndrome interóseo anterior”, se produce cuando el nervio mediano (uno de los dos nervios principales que inervan a la mano y registran la sensibilidad del pulgar y los primeros dedos) se comprime cerca del eje de flexión del codo. La causa más común de la lesión es la hipertrofia (incremento de la masa) del músculo pronador redondo situado en la parte anterior de los músculos del antebrazo y que está originada por el levantamiento de peso o actividades similares. La lesión es, por lo común, transitoria y benigna. Los más susceptibles a sufrir esta lesión son los levantadores de peso, quienes con frecuencia pretenden desarrollar (brazos de “Popeye”. Éstos notarán un debilitamiento gradual y asimetría de su capacidad para realizar curls de muñeca y ejercicios que impliquen agarres. Los pitchers con antebrazos excesivamente desarrollados también pueden padecer el síndrome del pronador. Si la lesión no se trata, o en caso de que el atrapamiento sea importante, puede producirse una lesión permanente de una rama motora del nervio mediano y provocar la atrofia de los músculos del antebrazo y la falta de fuerza de la mano.

DIAGNÓSTICO

La compresión del nervio a menudo se produce en el brazo o en el antebrazo, comúnmente entre las dos cabezas del pronador redondo en la línea de flexión del codo. Por lo general, sólo afecta a su rama motora, dando como resultado un déficit motor pero no sensitivo (falta de fuerza muscular, pero no pérdida de sensibilidad).

Los levantadores, ávidos de rendimiento, con esta lesión pueden experimentar síntomas de pérdida de su rendimiento en la extremidad afectada, con debilidad muscular pero sin dolor. A veces, los deportistas pueden sentir dolor como molestia sorda, el cual se localiza en la zona de los flexores del antebrazo (con frecuencia en el vientre del músculo pronador redondo) y empeora con movimientos de pronación (girar la palma hacia abajo con el brazo estirado hacia delante), o tras una actividad prolongada. Al contrario que con el síndrome del túnel carpiano, el dolor nocturno es raro. El examen físico revela debilidad significativa de los músculos flexores de los dedos, en especial en el músculo flexor del pulgar. La fuerza de pronación con frecuencia está preservada debido a que el músculo pronador redondo habitualmente no se comprime.

El síndrome del pronador es menos común que los demás atrapamientos del miembro superior, de modo que debe descartarse otra patología que cause dolor, falta de fuerza o entumecimiento, como el síndrome del túnel carpiano. Se requieren estudios de conducción nerviosa con EMG para diagnosticar este problema, con frecuencia solapado y asociado con otros trastornos. La resonancia del codo algunas veces puede mostrar atrapamientos ligamentosos y señales anormales en el nervio mediano, pero es probable que sea más valioso explorar la columna cervical con el fin de diagnosticar una posible hernia de disco que presente los síntomas del síndrome del pronador.

TRATAMIENTO

El tratamiento consiste en reposo inicial del miembro superior afectado y evitar la actividad deportiva. Aun cuando no hay una evidencia clara de su eficacia, se puede aplicar una inmovilización de muñeca con 15 grados de flexión, durante 4 a 5 semanas. El atleta debe aprender a realizar masajes de fricción en el lugar del atrapamiento o limitación muscular. Frecuentemente resuelven el síndrome el descanso, los estiramientos del antebrazo y el fortalecimiento de los antagonistas de los extensores de la muñeca, pero si los síntomas no mejoran y el médico sospecha que los ligamentos pueden estar atrapados, puede ser necesaria la exploración quirúrgica.

VUELTA A LA ACCIÓN

Los levantadores con esta lesión pueden volver a realizar ejercicios que estresen la parte anterior del antebrazo y la muñeca sólo cuando ya no sientan ningún dolor al llevarlos a cabo. Gradualmente, necesitarán fortalecer de nuevo el área afectada para conseguir simetría con el lado contralateral. Los deportistas de lanzamiento con este problema en su lado dominante pueden volver a su deporte tan sólo cuando el miembro lesionado alcance al menos el 80 por ciento de su fuerza normal y no sienta dolor al hacer movimientos de lanzamiento.

Doctor en Nutrición y medicina del deporte

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