LA ROTURA MENISCAL. TODO LO QUE NECESITAS SABER
CAUSAS COMUNES:
Las roturas meniscales pueden producirse en todos los grupos de edad. Por lo general, en los deportistas menores de 30 años que sufren rotura en su menisco medial, ésta se ocasiona en el curso de una lesión traumática de la rodilla; en situaciones extremas, éstos pueden ser incapaces de extender la rodilla por completo (conocido como bloqueo de la rodilla), entre los 30 y los 60 años, el atleta puede que no recuerde ninguna lesión específica pero se queja de la aparición de dolor después de una actividad particular. Aún cuando las roturas meniscales son más frecuentes que las laterales, ambas están causadas por torsión. El baloncesto, el fútbol nuestro deporte que muchos practican sin ser conscientes de lo lesivo que es para nuestras rodillas y nuestras piernas, teniendo elevados porcentajes de lesiones meniscales.
DIAGNOSTICO:
El cuadro más frecuente es dolor localizado y una pequeña inflamación después de la actividad física. El dolor se agrava con el movimiento de rotación de la pierna o en movimientos extremos. El deportista puede experimentar dolor posicional en la rodilla mientras duerme. Éste, con frecuencia, tiene dificultad para volver a su deporte concreto, pero no está incapacitado para su actividad cotidiana por los síntomas (aún cuando, si pierde la extensión de la rodilla, debe ser evacuado al centro médico). Casi todas las lesiones con rodillas dolorosas, producen molestias en el descenso de escaleras.
Hay que explorar el dolor localizado en la línea articular implicada. El menisco media se ubica en la línea articular interna, y el menisco lateral, en la línea externa de la rodilla. las maniobras de rotación, tales como la flexión y la extensión de la rodilla mientras que se rota interna y externamente el miembro inferior, pueden ayudar a diagnosticar una rotura de meniscos si estas maniobras producen dolor o síntomas. Escuchar un clic cuando se rota la rodilla puede indicar un ratón articular del menisco.
La rotura del menisco lateral se asocia algunas veces con quistes meniscales, los cuales se palpan como un tejido blando doloroso, firme e infiltrado en el centro de la línea articular lateral de la rodilla. Los deportistas mayores con osteoartitis coexistentes pueden tener una deformidad angular de tipo leve en la rodilla. Las radiografías estándar son típicamente normales, aún cuando pueden mostrar cambios degenerativos en los deportistas mayores. La resonancia es completamente segura en la confirmación del diagnóstico de una rotura de menisco.
TRATAMIENTO:
La circulación sanguínea de los meniscos es muy limitada, de modo que poca curación biológica puede llevarse a cabo en estas lesiones. Ocasionalmente los atletas hacen razonablemente bien el tratamiento no quirúrgico, pero en la mayoría de los casos es necesaria la cirugía. Durante la cirugía artroscópica, se elimina la cantidad de tejido meniscal mínimo que e requiere para solventar el problema.
El éxito de la menisectomía parcial artróscopica está asegurado en la ausencia de enfermedad articular degenerativa. Los problemas a largo plazo de enfermedad articular degenerativa, que sigue a la menisectomia parcial se relacionan con la cantidad de menisco eliminado; estos efectos se minimizan con las técnicas artroscópicas actuales.
La cirugía es prácticamente ambulatoria con una rápida recuperación. Los deportistas con frecuencia vuelven a su función completa a las 6 semanas. Un programa de ejercicios en domicilio, supervisados por profesionales como un fisioterapeuta, acelera la recuperación. El ejercicio se debe de centrarse en el fortalecimiento de la extremidad inferior, énfasis en los ejercicios de la cadera para reducir el estrés sobre la articulación de la rodilla.
Ojo con los suplementos que les dan aplicaciones o efectos milagrosos para el menisco no existe producto que beneficie, lo único que puede mantener la hidratación que este contrastado es la vitamina c, y si necesitais colageno que mejor que comer o prepararse una buena gelatina.
VUELTA A LA ACCIÓN.
Con cuidados conservadores (no quirúrgicos ), alrededor del 30% de los deportistas va bien. Éstos pueden regresar a su actividad deportiva en alrededor de 8-12 semanas, y están limitados por dolores ocasionales o por inestabilidad. Tras la cirugía, los deportistas vuelven antes, algunas veces dentro de las 4 semanas. aún cuando algunos deportistas profesionales se han reincorporado en menos tiempo (unas 2 semanas), se debe de tener presente que éstos se rehabilitan de 5 a 6 días por semana durante muchas horas cada día. Como con muchas lesiones de rodilla, la utilización de una sujeción o un vendaje funcional usualmente depende del deseo del deportista de llevarlos o no. Estos elementos, por lo general, ofrecen más soporte propioceptivo que mecánico efectivo.
Los deportistas que regresan al deporte deben progresar lentamente y monopolizar la inflamación y el dolor. Si aparecen, se debe disminuir el nivel de actividad mientras se continúa con el programa de fortalecimiento de la extremidad inferior con énfasis en los ejercicios de cadera. La fuerza de la cadera es crítica en el apoyo de la extremidad inferior completa. El hielo se usa después del ejercicio para reducir la inflamación y el dolor.
Recordar antes de volver a la practica deportiva asesórate por un profesional cualificado.