EL SÍNDROME DEL TUNEL DEL TARSO?
CAUSAS COMUNES
Hay dos abultamientos (maléolos) en el tobillo, uno en el lado interno y otro en el lado externo. Detrás del lado interno hay un túnel a través del cual pasan muchas estructuras, incluido el nervio tibial posterior. El síndrome del túnel del tarso ocurre cuando dicho túnel se estrecha, irritando al nervio tibial posterior. Las causas más comunes de este síndrome son la biomecánica alterada y un trauma. Entre los factores que contribuyen a su aparición se incluyen la pronación excesiva, el déficit postibial y el pie plano congénito.
DIAGNÓSTICO
Los deportistas con el síndrome del túnel del tarso normalmente experimentan un dolor vago en el lado interno del tobillo. Pueden estar presentes entumecimientos, quemazón, parestesias y una sensación de cosquilleo en la cara interna del tobillo. Estos síntomas pueden irradiarse hacia el arco del pie. Los síntomas, por lo general, mejoran con descanso y empeoran con la carrera y otras actividades físicas.
TRATAMIENTO
Las ortesis pueden ser una ayuda para corregir los síntomas derivados de problemas biomecánicos, como la hiperpronación del pie plano. En ocasiones, una inyección de esteroides en el túnel ayuda a calmar la inflamación. Si el tratamiento conservador no es efectivo, la descompresión quirúrgica puede ser necesaria.
VUELTA A LA ACCIÓN
La vuelta al deporte tras el síndrome del túnel del tarso depende de las causas subyacentes. Ésta se puede producir una vez que el deportista tenga un rango de movimiento completo y libre de dolor, y que con la actividad no reaparezcan los síntomas. El tratamiento conservador permite que el deportista vuelva al deporte como mínimo a las 2 ó 3 semanas, cuando esté libre de síntomas. En función del tipo de procedimiento, el tratamiento quirúrgico puede requerir que el deportista esté ausente del deporte durante 2 ó 3 meses.