EL ZINC. SUS PROPIEDADES AL COMPLETO

 

OTRAS DENOMINACIONES:

zinc aminoácido quelado, gluconato de zinc, orotato de zinc, sulfato de zinc, citrato de zinc.

UNIDAD DE MEDIDA:

La unidad de medida del zinc es el miligramo (mg).

DESCRIPCIÓN

El zinc es un elemento presente en la corteza terrestre en una proporción del 0,02%. Apareciendo en la naturaleza en la composición de diversos minerales tales como la smithsonita, la esfalerita, la zincita, la wilenita, la franklinita y la ganita. Se trata de una sustancia esencial para las plantas, los animales y los seres humanos.

El zinc ha llegado rápidamente a ser reconocido como un nutriente muy importante, envuelto en un amplio rango de procesos metabólicos, los cuales son perturbados en muchas enfermedades.

A pesar del hecho de que hay muchos miles de publicaciones (2.500 en los últimos años) indicando la importancia clínica del zinc, solamente un puñado de profesionales de la salud están aplicando el conocimiento disponible sobre este notable elemento nutritivo.

PRINCIPALES FUNCIONES CORPORALES

• Cooperar en la absorción y la acción normal de las vitaminas, especialmente las que integran el llamado complejo B.
• Participar en la composición de al menos 100 enzimas envueltas en la digestión y el metabolismo, incluida la anhidrasa carbónica, la cual es necesaria para la respiración de los tejidos.
• Colaborar en la síntesis de la insulina, hormona de la que forma parte.
• Ayudar en la formación de la enzima necesaria para desdoblar la molécula del alcohol.
• Cooperar en la digestión de los hidratos de carbono.
• Participar en el metabolismo del fósforo.
• Ayudar en la síntesis de los ácidos nucleicos, los cuales controlan la formación de las diferentes proteínas en la célula.
• Favorecer el crecimiento y adecuado desarrollo de los órganos reproductores, así como el normal funcionamiento de la glándula prostática.
• Mejorar y acelerar los procesos de curación de heridas y quemaduras.
• Colaborar en la síntesis del ácido desoxiribonúcleico, el cual es la sustancia maestra de la vida, transportando los rasgos hereditarios y dirigiendo la actividad de cada célula.
• Actuar en la utilización del nitrógeno y el azufre por el organismo.
• Facilitar los procesos de división y crecimiento celular.
• Cooperar en la liberación de la vitamina A de su almacén hepático.
• Participar en el metabolismo de la glándula pituitaria, las glándulas adrenales, los ovarios y los testículos.
• Favorecer la producción del esperma masculino y óvulos femeninos.
• Colaborar esencialmente en el desarrollo del feto, afectando su carencia al crecimiento del esqueleto, sistema nervioso y cerebro antes de nacer.
• Mantener saludable el metabolismo hepático.
• Favorecer el adecuado mantenimiento del sentido del gusto a través de su papel en la síntesis de la gustina, la principal proteína de la saliva.
• Mantenimiento adecuado de la piel, las uñas y el cabello.
• Favorecer la actividad mental.
• Favorecer el mantenimiento de las funciones inmunitarias en condiciones óptimas a través de su acción estimulante sobre la glándula timo.

 

Dosis diarias recomendadas de Zinc
	INFANTES (0-1 años)	NIÑOS (1-10 años)	ADULTOS (20-40 años)	GESTACIÓN	LACTANCIA
Instituto de Nutrición y Bromatología del CSIC (España)	3-5 mg	5-10 mg	15 mg	+5 mg	+10 mg
NRC (National Research Council, USA)	–	–	15 mg	+15 mg	+25 mg
NUTRICIÓN ÓPTIMA	–	–	15-50 mg	–	–
MEDICINA ORTOMOLECULAR	–	–	50-150 mg	–	–

ABSORCIÓN Y ALMACENAMIENTO

Aproximadamente el 20% del zinc dietético es absorbido. La absorción del zinc a partir de los alimentos que contienen proteína animal (carne, pescado, huevos y leche) es más eficiente que la realizada a partir de los alimentos vegetales como los cereales y los granos de soja. El aminoácido cisteína ayuda al zinc a ser absorbido, siendo las proteínas animales ricas en él.

Tras la absorción del zinc comienza su proceso metabólico, en el que en primer lugar los jugos pancreáticos, probablemente aminoácidos o péptidos, se unen al mineral y lo transportan a través de las células intestinales. El mismo complejo es apto para intercambiar el zinc entre el plasma y las células epitetiales de revestimiento de los vasos sanguíneos. En dichas células el zinc es mantenido hasta que sus concentraciones en el plasma sanguíneo bajan y provocan que el zinc sea liberado de ellas hacia el plasma uniéndose a las proteínas sanguíneas. A partir de aquí la entrada de zinc al cuerpo se ve controlada.

Dentro de las células, el zinc está combinado con diversas proteínas, péptidos y aminoácidos, incluyendo numerosas enzimas. Algunas de esas aproximadamente 100 enzimas son conocidas, pero aquellas que han sido aisladas en los tejidos humanos son: la anhidrasa carbónica, la deshidrogenasa alcohólica, la fosfatasa alcalina, la deshidrogenasa láctica, la superóxido dismutasa (SOD) y la carboxipeptidasa pancreática. El mineral también se combina con sustancias no enzimáticas tales como los ácidos nucleicos.

El cuerpo de una persona adulta contiene entre 2 y 3 gramos de zinc, concentrándose las mayores cantidades de este elemento en el varón, en la glándula prostática (850 mcg), el semen (3000 mcg) y el esperma (2000 mcg). Los ojos contienen entre 385 y 571 mcg por gramo de masa seca. El cabello entre 125 y 225 mcg por gramo (reflejando muy bien el status corporal de zinc del individuo, cuando el cabello está en crecimiento). La concentración en los músculos, el hígado y los riñones es de 55 mcg por gramo. El plasma sanguíneo contiene entre 70 y 120 mcg por 100 ml, mientras que las células rojas de la sangre tienen entre 12 y 14 mcg por ml, y las células blancas por su parte cuentan con 25 veces más cantidad. En el plasma sanguíneo la albúmina es la principal proteína transportadora para el zinc, estando también algunas reservas del mineral firmemente unidas a las globulinas.

Como resumen podemos añadir que el 63% del zinc corporal reside en los músculos y huesos, con un 20% en la piel, estando el resto ampliamente distribuido –como hemos visto-, en variables concentraciones en distintos tejidos corporales

 

La excreción diaria de zinc es de promedio de 1,6 mg para la mujer y de 2,2 mg para el hombre, con un extra de 0,6 mg en cada emisión seminal varonil. La pérdida más importante de zinc se produce en las heces, consistiendo en el mineral secretado en los jugos intestinal y pancreático, más el zinc contenido en los alimentos ingeridos que no se ha absorbido. La excreción urinaria es bastante constante, perdiéndose por esta vía diariamente entre 400 y 600 mcg de zinc, en una dieta normal.

La inanición produce un marcado incremento de la pérdida urinaria de zinc, que refleja el incremento del desdoblamiento de las células corporales. Cuando los niveles del mineral en el organismos son bajos, menos cantidad es excretada por la orina.

Los incrementos de las pérdidas de zinc por la orina pueden ocurrir por la porfiria, el alcoholismo y las enfermedades del hígado y los riñones, cuando grandes cantidades de proteínas son excretadas en la orina. La excreción de zinc se incrementa acusadamente por el empleo de fármacos diuréticos del tipo de la tiacida, pero decrece con el ácido etacrínico y la frusemida. Las pérdidas por el sudor pueden ser significativas (hasta 1 mg por litro), pero cuando el mineral es deficitario, la concentración en el sudor es considerablemente menor.

PERJUICIOS QUE OCASIONA SU DEFICIENCIA

• Lesiones en la piel similares al eczema, especialmente alrededor de la boca, los ojos, la vagina, la nariz y las manos.
• Pérdida excesiva de cabello.
• Apatía mental.
• Defectos en los órganos reproductores, particularmente en los testículos del varón.
• Tasa de crecimiento reducida.
• Lento desarrollo mental.
• Reacciones indolentes.
• Depresión post-parto.
• Falta de instintos maternales.
• Elevada incidencia de anormalidades congénitas.
• Pérdida del sentido del olfato y del gusto.
• Manchas blancas en las uñas.
• Incremento de la susceptibilidad a las infecciones.
• Retraso de la madurez sexual.
• Retraso de la curación de heridas y quemaduras.
• Aterosclerosis (cuando la deficiencia lo es también de cobre y vanadio).
• Cambios en la estructura y tamaño de la glándula prostática.
• Cáncer de próstata.
• Disminución del apetito.
• Bajo conteo espermático.
• Disturbios del sueño y la conducta.
• Ceguera nocturna.
• Mayor tendencia a padecer infecciones.
• Problemas psiquiátricos.
• Baja tolerancia a la glucosa.
• Enfermedad de los tejidos conectivos.
• Problemas gastrointestinales.

 

 

 

El zinc puede ser beneficioso para las siguientes dolencias (en negrita usos principales)
SISTEMA/ÓRGANO CORPORAL	DOLENCIA
Articulaciones	Artritis reumatoide
Boca	Gingivitis
Cerebro/Sistema nervioso	Alcoholismo Epilepsia
Corazón	Arterioesclerosis Aterosclerosis
Estómago	Úlcera
Glándulas	Prostatitis
Hígado	Cirrosis Hepatitis
Huesos	Esguinces y desgarros
Intestinos	Enfermedad de Crohn Enfermedad celíaca Insuficiencia pancreática Úlcera péptica
Ojos	Ceguera nocturna Degeneración macular Vista cansada Visión borrosa Desordenes de visión y de foco
Piel	Acné Cicatrización de quemaduras Dermatitis Eczema Cicatrización de heridas Psoriasis Estrías Acrodermatitis enteropática Dermatitis exfoliativa
Sistema circulatorio/Sangre	Arterioesclerosis Aterosclerosis Colesterol alto Diabetes Enfermedad de Hodgkin Anemia drepanocítica
Sistema inmunológico	Mononucleosis Inmunodeficiencia Escaso tamaño y actividad de la glándula timo Infección SIDA (VIH)
Sistema reproductor	Prostatitis Infertilidad Impotencia Hipogonadismo Amenorrea Falta de ovulación Disminución de la cantidad de esperma Herpes genital
Uñas	Leuconiquia Deformación Manchas blancas Pirolúria
General	Alcoholismo Crecimiento pobre Úlceras Pérdida del gusto y del olfato Hiperactividad infantil Kwashiorkor Enfermedad de Wilson Depresión postparto Toxemia por cadmio Problemas de conducta

 

CAUSAS QUE PRODUCEN SU DEFICIENCIA

EN LA DIETA

Los factores que provocan menor biodisponibilidad del zinc en la dieta son:

1. El ácido fítico, ampliamente distribuido en los cereales, principalmente en las legumbres y nueces, y en menor medida en los tubérculos y frutas. Esta sustancia forma en los intestinos complejos metálicos de fitatos altamente insolubles, los cuales no pueden absorberse. El coeficiente de absorción del zinc depende de la relación fitato/zinc. Con una relación mayor de 15, pueden producirse bajos niveles de zinc en la sangre; si la relación es de 25 o más, el crecimiento de un joven puede verse seriamente perjudicado.
2. La fibra dietética, presente en el régimen alimenticio diario, la cual contiene además del ácido fítico, otros constituyentes que se unen fuertemente al zinc en el intestino impidiendo su absorción. Elevadas ingestiones de granos integrales, cereales, frutas, vegetales y nueces suministran mucha fibra dietética. La cocción reduce los efectos adversos del ácido fítico y de la fibra dietética sobre la absorción del zinc.
3. Los polifosfatos, que son añadidos a muchos alimentos procesados (de manera especial a las carnes congeladas y en conserva), pueden combinarse con el zinc y tomarlo insoluble (fosfato de zinc).
4. El EDTA (Etilendiaminotetraacético), el cual se quela irreversiblemente con el zinc, formando un quelato muy estable e insoluble que inmoviliza al nutriente. El EDTA puede ser introducido durante el procesado del alimento.
5. El cadmio (alimentados ahumados, tabaco) es un mineral tóxico que juega un importante papel en las deficiencias de zinc. Elevados consumos de cadmio acentúan los signos de deficiencia de zinc, puesto que esta sustancia tóxica se almacena en el organismo en ubicaciones similares al mineral nutricional.
6. Las proteínas vegetales texturizadas (PVT), usadas como sustitutos o suplementos de la carne, pueden contribuir a reducir las ingestiones de zinc en la dieta. Tales productos generalmente contiene solamente la mitad o la tercera parte del zinc de los auténticos productos cárnicos. Adicionalmente, ellas tienen altos contenidos en fitato, con un balance fitato/zinc que excede 25:1. Cuando las PVT son la única fuente de proteínas en la dieta de animales de experimentación, se han producido bajas tasas de crecimiento y reducción de los niveles de zinc en la sangre.

EN EL HOMBRE

• Anorexia nerviosa.
• Dietas extravagantes.
• Dietas para la reducción de peso.
• Dietas de exclusión por alergias alimentarias.
• Vegetarianismo estricto (veganismo).
• Dietas de restricción de proteínas.
• Tomar suplementos de hierro en la dieta.
• Niños con acrodermatitis enteropática.
• Enfermedad celíaca.
• Aclorhidria o Hipoclorhidria gástrica.
• Cirrosis alcohólica.
• Insuficiencia pancreática.
• Inanición.
• Diabetes mellitus.
• Ingestión de diuréticos.
• Empelo de penicilamina.
• Pérdida crónica de sangre.
• Diálisis renal.
• Dermatitis exfoliativa.
• Sudoración excesiva.
• Enfermedad inflamatoria del intestino.
• Parásitos intestinales y estrongiloides.
• Enfermedad hepática, incluyendo hepatitis viral.
• Diarrea crónica.
• Cirugía o traumatismo.
• Cáncer.
• Esfuerzos del crecimiento y la pubertad.
• Embarazo y lactancia.
• Úlceras.
• Ataque cardíaco.
• Fibrosis cística.
• Enfermedad de Hodgkin.

FORMAS QUÍMICAS DEL ZINC EN SUPLEMENTOS

• Zinc aminoácido quelado (10 mg por cada 100 mg).
• Gluconato de zinc (13 mg por cada 100 mg).
• Orotato de zinc (17 mg por cada 100 mg).
• Sulfato de zinc (22,7 mg por cada 100 mg).
• Kelp (43 mg por cada 100 g).
• Germen de trigo (14,3 mg por cada 100 g).
• Hígado de res deshidratado (17 mg por cada 100 g).

TOXICIDAD Y SUS SÍNTOMAS

El zinc es un mineral relativamente no tóxico, siendo amplio el margen existente entre sus ingestiones dietética y terapéutica. Comparado con otros nutrientes como el cobre, el selenio, el níquel, el zinc dietético no es tóxico, produciéndose casos de toxicidad por zinc debidos casi exclusivamente a fuentes inorgánicas o más frecuentemente industriales. Así por ejemplo, se han reportado intoxicaciones por ingerir alimentos o bebidas ácidas que han sido almacenados en contenedores galvanizados, o también debidas a las inhalaciones de vapores de zinc por parte de trabajadores en hornos de fundición.

Algunos envenenamientos pueden producirse igualmente por beber agua envasada en contenedores similares a los usados para soluciones de diálisis en pacientes renales. Los síntomas de intoxicación por zinc son: náuseas, vómitos, fiebre, deficiencia de cobre, de hierro y de manganeso.

PRECAUCIONES O SUGERENCIAS

• Existen diversas interacciones del zinc con otros minerales que es preciso conocer para su mejor utilización, dichas interacciones son las siguientes:

1. El zinc puede combinarse con el calcio en el contenido intestinal y ambos minerales hacer lo propio con el ácido fítico y producir complejos insolubles.
2. El zinc reacciona con el calcio en los huesos, de forma que el primero queda depositado en la matriz blanda antes de la mineralización con el calcio. El incremento de depósitos de calcio en los huesos favorece el incremento de la absorción de zinc por los huesos. En esta situación el zinc puede estar actuando en la enzima fosfatasa alcalina necesaria para la calcificación del esqueleto.
3. Interacción con el cobre. Cuando el cobre se incrementa en el plasma sanguíneo, la absorción del zinc por las proteínas del plasma desde las células intestinales, se ve perjudicada, reduciéndose la entrada de zinc al organismo. Un incremento en la razón dietética cobre/zinc (de un valor normal de 4 hasta 14 ó 20, provoca un incremento en el colesterol sanguíneo que es potencialmente importante en el desarrollo de la aterosclerosis. Altas razones cobre/zinc pueden obtenerse indistintamente elevando la ingestión de cobre o disminuyendo la de zinc.
4. Antagonismo con el cadmio. Cuando ambos minerales están presentes en la dieta ellos compiten por la absorción, de forma que altos niveles de cadmio impiden la adecuada absorción de zinc y viceversa. El cadmio se puede acumular en los riñones provocando hipertensión arterial, bien por acción directa, bien por la retención de sodio que provoca. El zinc en cantidades adecuadas puede invertir estos efectos.

• Es necesario incrementar la ingestión de zinc cuando se toman altas dosis de vitamina B6.
• Al añadir suplementos de zinc a la dieta es necesario incrementar el consumo de la vitamina A (retinol).
• Para aliviar los síntomas del resfriado, se usan pastillas que proporcionan 13-23 mg de gluconato de zinc o de gluconato de zinc-glicina, generalmente cada 2 horas durante el día, pero sólo durante algunos días. El efecto óptimo se logra cuando estas formas químicas de zinc se utilizan cuando aparecen los primeros síntomas.
• El zinc inhibe la absorción de cobre; la deficiencia de cobre puede producir anemia, reducir los niveles de colesterol HDL (“bueno”) o producir arritmias cardíacas. Se debe aumentar el consumo de cobre si el uso de suplementos de zinc continúa durante más que unos cuantos días (excepto en las personas con enfermedad de Wilson).
• Se ha descrito que el consumo de más de 300 mg al día de zinc puede reducir la función inmunológica.
• El zinc compite por la absorción con el cobre, el hierro, el calcio y el magnesio. Un suplemento con varios minerales puede ayudar a prevenir un desequilibrio de minerales como resultado del uso de grandes cantidades de zinc durante períodos prolongados.

INTERACCIONES CON FÁRMACOS

Medicamentos que reaccionan con el zinc:

• Acetato de calcio (+)
• Ácido fólico (+)
• Ácido Valpróico (?)
• Anticonceptivos orales (+)
• Aspirina (+)
• AZT (+)
• Benazepril (+)
• Benzamicina (+)
• Captopril (+)
• Clorhexidina (?)
• Ciprofloxacino (-)
• Cisplatino (+)
• Clindamicina tópica (+)
• Colestipol (+)
• Corticoesteroides tópicos (+)
• Ciclofosfamida (+)
• Diuréticos Tiazida (+)
• Docetaxel (+)
• Doxiciclina (-)
• Estrógenos (combinados) (?)
• Lisinopril (+)
• Medroxiprogesterona (?)
• Metotrexato (+)
• Metiltestosterona (-)
• Metronidazol (vaginal) (+)
• Minociclina (+) (-)
• Ofloxacino (-)
• Penicilamina (-)
• Quimioterapia (+)
• Quinapril (+)
• Ramipril (+)
• Risedronato (-)
• Separadores de ácidos biliares (+)
• Fluoruro sódico (+)
• Tetraciclinas (-)
• Tetraciclina (-)
• Warfarina (-)

Por precaución siempre consulte a su médico o a su farmacéutico antes de tomar el zinc junto con cualquier fármaco.

NUTRIENTES SINÉRGICOS

• Vitamina A (retinol).
• Vitamina B6 (piridoxina).
• Fósforo.